Once partidos de la oposición han sellado un acuerdo para que
3.500 ayuntamientos de todo el país que representan a 15 millones de
habitantes presenten un recurso de inconstitucionalidad contra la Ley de
Reforma Local. Según sus promotores, será la primera vez que se utilice
este mecanismo de impugnación previsto en la Ley Orgánica del Tribunal
Constitucional bajo la denominación de Conflicto en Defensa de la
Autonomía Local.
Fuente: Diario Progresista.
La iniciativa surge con el respaldo de la inmensa mayoría de la
oposición --PSOE y PSC, Izquierda Plural (IU-ICV-CHA), Unión, Progreso y
Democracia (UPyD), CiU, ERC, BNG, Coalición Canaria-Nueva Canarias, y
Compromís-Equo--. Los nacionalistas vascos no se han unido puesto que la
Ley de Reforma local no afecta a sus territorios.
Diputados de todas estas formaciones se han reunido este viernes
en el Congreso con varios alcaldes de las mismas para perfilar el
contenido del recurso y constatar que contarán con el apoyo necesario
para poder presentarlo.
La Ley Orgánica del Tribunal Constitucional establece como
requisitos que la impugnación cuente con el respaldo de al menos un
séptimo del total de ayuntamientos españoles, es decir, un mínimo de
1.160 municipios, y que éstos representen a su vez al menos a una sexta
parte de la población --7,6 millones de habitantes--.
INTENTO FALLIDO EN 2002
El secretario de Política Municipal del PSOE, Gaspar Zarrías, ha
avanzado que esas condiciones se cumplirán con creces porque los
partidos que impulsan el recurso lograrán reunir a unos 3.500
ayuntamientos donde viven 15 millones de habitantes. Zarrías confía en
que sea la primera vez que se logre utilizar esta herramienta tras el
intento que se hizo en 2002 contra la Ley de Estabilidad Presupuestaria
aprobada por el Gobierno de José María Aznar, que finalmente no
fructificó por deficiencias formales.
Tras el acuerdo político el mecanismo formal previo a la
presentación del recurso arrancará el próximo lunes, cuando todos los
ayuntamientos empezarán a celebrar plenos para decidir si presentan o no
recurso.
Una vez que se haya alcanzado la cifra de 1.160 ayuntamientos y de
7,6 habitantes que se necesitan como mínimo, el consistorio con más
población de los que se sumen encabezará, en representación de todos los
demás, el documento que se enviará al Ministerio de Hacienda y
Administraciones Públicas para que pida opinión sobre el recurso al
Consejo de Estado.
Según han informado a Europa Press fuentes parlamentarias, lo
previsible es que el Ayuntamiento de Barcelona --por ser el de mayor
población-- sea el que encabece el escrito que se dirigirá al
departamento que dirige Critóbal Montoro para que solicite informe
pertinente al Consejo del Estado, que es preceptivo, pero no vinculante.
Una vez que el órgano consultivo conteste, los municipios tendrán un
mes para hacer efectiva la interposición del recurso ante el TC.
TAMBIÉN LA RECURRIRÁN DIPUTADOS Y GOBIERNOS AUTONÓMICOS
Este recurso de los ayuntamientos se sumará además al que
presentarán a nivel general los grupos de la oposición citados
anteriormente desde el Congreso con la firma de 50 diputados, y a los
que preparan Comunidades Autónomas como Asturias, Andalucía y Cataluña,
así como varios parlamentos autonómicos.
Los argumentos de todos estos recursos serán los mismos: que la
Reforma Local vulnera competencias autonómicas y atenta contra la
autonomía local que consagra la Constitución. En esta tesis han incidido
los partidos que han hecho frente común contra una ley que, según han
denunciado, el PP ha aprobado "sin consenso" y que abre la puerta a la
"privatización" si no la "desaparición" de los servicios sociales que
prestan los ayuntamientos.
"No queremos que los ayuntamientos sean meras oficinas
administrativas bajo la tutela del ministro de turno", ha proclamado
Zarrías. A su juicio, la nueva norma supone la "desapoderación
competencial" de los consistorios que alcanza niveles "brutales" en el
caso de los municipios con menos de 20.000 habitantes. También ha
criticado que con ella se establezca una dependencia jerárquica y los
entes locales queden subordinados a otras administraciones.
La portavoz socialista de Administraciones Públicas en el Congreso
y diputada del PSC, Meritxell Batet, por su parte, ha alertado de la
pérdida de empleo público que acarreará la reforma y de que supondrá "un
torpedo" contra las políticas sociales que implementan los entes
locales. En la mima idea ha insistido la diputada de IU, Ascención de
las Heras, quien ha abundado en que la ley dará lugar a que haya
"ciudadanos de primera, segunda y tercera", en función de la situación
financiera del lugar donde residan.
COMPROMISO PARA SU DEROGACIÓN
De las Heras ha definido la norma como "un atentado a la
democracia" y ha puesto el énfasis en que, como harán con otras leyes
"impuestas por la mayoría absoluta" del PP, cuando los que ahora están
en la oposición tengan "fuerza de gobierno" la sustituirán por otra que
garantice la independencia local.
El coordinador del grupo parlamentario de UPyD, Andrés Herzog, ha
denunciado que el Gobierno haya optado por reforzar las competencias de
las Diputaciones Provinciales, en lugar de suprimirlas, por ser un foco
de "clientelismo y corrupción" y que haya rechazado la opción de la
fusión de municipios.
Desde CiU, su diputada Carme Sayós ha cargado contra la "obsesión
recentralizadora" del PP y ha puesto de relieve que 500 ayuntamientos en
los que CiU tiene representación y que representan a unos 4 millones de
habitantes secundarán el recurso ante el TC.
En representación de Compromí-Equo, Joan Baldoví, ha mostrado su
"apoyo entusiasta" al recurso en defensa de los ayuntamientos que son,
en su opinión, "la administración que mira a los ciudadanos a la cara y a
los ojos y que mejor conoce sus necesidades". Para Chesús Yuste, de la
CHA, la ley caerá como una "bomba nuclear" para el mapa municipal de su
comunidad porque amenaza al 96 por ciento de sus localidades, ya que en
Aragón sólo hay cuatro municipios con más de 20.000 habitantes y sólo 25
con más de 5.000.
Los promotores del recurso han pedido al Alto Tribunal que, una
vez se presente, lo resuelva con "celeridad", aunque dan por hecho que
no habrá fallo antes de las elecciones municipales previstas para 2015.